UN FACTOR HUMANO
Por el Dr. Antonio LAS HERAS.
La Parapsicología se constituye, definitivamente, como Ciencia en 1932 cuando la Universidad de Duke, (E.E. U.U.) habilita la primera cátedra dedicada a su enseñanza y se abre el primer laboratorio académico para investigaciones extrasensoriales, dirigidos por el doctor en Biología Joseph Banks Rhine. A partir de aquellos días mucho hemos descubierto los parapsicólogos. Sabemos, ahora, que el potencial parapsicológico es exclusivo del ser humano. Vegetales y animales carecen de ella, pero pueden recibir influencias humanas a través de esta fuerza. Todos contamos con esta fuerza tan especial. Pero la gran mayoría ignora no sólo como desarrollarla, sino – y es lo más delicado – desconoce la manera de utilizarla e interpretarla cuando surge de manera espontánea. ¿Qué otra cosa que un hecho de telepatía es cuando una madre siente que su hijo, que está viviendo a cientos de kilómetros de distancia, ha sufrido un accidente?. ¿Qué otra cosa que una precognición es cuando alguien despierta con la certeza – sin fundamento – de que se accidentará el medio de transporte que usará ese día y así ocurre? Nuestra vida cotidiana está llena de hechos parapsicológicos: pero la comunidad no ha sido educada para tenerlos en cuenta. Podrían así evitarse muchas desgracias y, además, activar una fuerza que si está viva en nuestra alma es para que la utilicemos beneficiosamente.
¿Qué es la Parapsicología?. Una buena definición, concreta y simple, está en el Documento de Buenos Aires, firmado durante el Primer Congreso Argentino de Parapsicología (1), (Buenos Aires, setiembre de 1981) que tuve el honor de presidir. Dice que “Parapsicología es la ciencia humanística que tiene como objeto de estudio al factor por medio del cual nos comunicamos sin intervención de los cinco sentidos (fenómenos extrasensoriales) y actuamos en el mundo exterior sin intervención de la fuerza muscular (fenómenos psikinéticos). A dicho factor se lo denomina, indistintamente, ´potencial parapsicológico´o ´estructura psi´”.
Hay dos tipos de fenómenos parapsicológicos. Extrasensoriales: telepatía, clarividencia y precognición. Psikinéticos (o “telekinéticos” o “psicokinéticos”): movimiento de objetos, levitación, bilocación, ectoplasmía y fantasmogénesis. Los más frecuentes son los extrasensoriales. Se trata de formas extraordinarias de percepción. Telepatía es la transmisión de un contenido mental – de una persona a otra – a la distancia, sin que medie lenguaje verbal o gestual alguno. El contenido transmitido por telepatía puede ser un pensamiento o una emoción. Clarividencia es el conocimiento cierto de un hecho contemporáneo que sucede a una distancia tal que ninguno de los cinco sentidos comunes puede captarlo. La clarividencia explica lo que los orientales llamaron ´viaje astral´. Precognición es el conocimiento cierto de un acontecimiento que recién será real en un futuro, y es inaccesible por razonamiento, deducción o inferencia lógica. La precognición no es un presentimiento o una intuición. Estas son un producto mental. En cambio el conocimiento de un hecho futuro no deducible sólo puede originarse en el potencial parapsicológico mediante una especial asimilación de variaciones en las dimensiones del espacio y el tiempo, que no están a nuestro alcance sensorial, ni consciente.
Los fenómenos parapsicológicos pueden fomentarse y desarrollarse en condiciones adecuadas practicando métodos y técnicas de reprogramación psíquica y Control Mental.
(1).: Entre otros, firmaron el Documento de Buenos Aires, los parapsicólogos Dr. Oscar González Quevedo, S.J., Lic. Enrique Novillo Paulí, S.J. y el Dr. Juan-Jacobo Bajarlía; el psicoanalista Dr. Arnaldo Rascovsky: el especialista en medicinas comparadas, Prof. Dr. Samuel Tarnopolsk y; el analista junguiano Prof. Dr. Vicente Rubino.